Las posturas repetitivas al bajar la cabeza para mirar el teléfono cientos de veces al día están acelerando el descolgamiento de la papada y con ello un envejecimiento prematuro de la zona del cuello a edades tempranas; en EEUU ya lo han bautizado como ‘tech neck’.
El cuello es una de esas zonas olvidadas en el ritual de cuidados diarios. La mayoría de personas no sabe si tratarlo como parte del rostro (así debería ser) o como parte del cuerpo, lo que lleva, en muchos casos, a ignorarlo. Sin embargo, cada vez hay una mayor preocupación por su envejecimiento prematuro que los expertos atribuyen al uso del móvil.
Hoy en día, son más los jóvenes quienes presentan un envejecimiento prematuro del cuello, síntoma característico de edades más avanzadas.
El hecho de mirar permanentemente pantallas de móviles, además de ocasionar aumento de tensión y rigidez de cuello y hombros, puede producir envejecimiento prematuro de esa piel del cuello, con aumento de líneas finas, arrugas, hundimientos, deshidratación, pérdida de densidad y de volumen ».
¿Qué factores provocan el envejecimiento digital del cuello?
Además de la genética, en el envejecimiento de la piel influye de forma decisiva el exposoma , un término que hace referencia a los factores ambientales y de exposición a los que estamos sometidos todas las personas desde que nacemos: el estrés, la alimentación, la contaminación, la actividad física, el tabaco, los cosméticos…Aunque, según los expertos, se necesitan estudios más concretos que relacionen el uso del móvil o cualquier otro dispositivo digital con el envejecimiento prematuro de la piel , es laudable plantear que existe una relación causal . Además, la piel del cuello tiene unas características diferentes a las de la cara. Su capacidad defensiva ante el envejecimiento es menor, partiendo simplemente del hecho de que su piel es más fina y con menos colágeno y elastina y, siguiendo, porque posee menos glándulas sebáceas,por lo que tiene mayor tendencia a la deshidratación. Además, es más débil ante las agresiones de los rayos UV y luz azul: su número de melanocitos es menor y, por tanto, su producción de melanina defensiva está más limitada. Si a esto le sumamos que cuenta con menor soporte muscular que el rostro pero que, a la vez, la acción de la gravedad le afecta en mayor medida y de forma más directa, resulta evidente por qué la tendencia a la laxitud es bastante pronunciada en esta zona que, hoy en día, cuenta con el añadido de un ‘castigo’ adicional como es doblarlo
Cómo prevenir y tratar las arrugas y la flacidez del cuello
Hidratar de la piel a diario. Aplicar una buena crema hidratante confiere a la piel la cantidad de agua necesaria para que actúe como barrera frente a las agresiones externas.
Proteger el cuello de la luz azul que emiten los dispositivos electrónicos que se ha demostrado aumenta los radicales libres y, por lo tanto, acelera el envejecimiento cutáneo. Para ello es necesario utilizar a diario un protector solar de amplio espectro que proteja también de la luz azul.
Esperamos os haya sido interesante el artículo de hoy.